En la Fundació Assut estamos de enhorabuena. Celebramos los recientes doctorados, ambos por la Universidad Politécnica de Valencia, de nuestro presidente, Vicent Sales, y nuestra colaboradora Mar Ortega. Lo celebramos porque, como han reconocido sus respectivos tribunales de evaluación, sus tesis constituyen importantes contribuciones al conocimiento de la Huerta de Valencia y, de alguna manera, también a su conservación.

Aprovechamos la ocasión para reseñar ambos trabajos y para reivindicar de nuevo, muy especialmente desde el estudio y el conocimiento, el enorme interés que tienen nuestros paisajes culturales del agua, con la Huerta como referencia.

El trabajo de Vicent Sales en torno a la evolución de los regadíos históricos de la Huerta (Las ampliaciones modernas en los regadíos históricos. Jovedat y Extremal de la Real Acequia de Moncada) “reclama una versión revisada y reducida destinada a librerías”, como ha apuntado Carles Sanchis Ibor. La tesis de Mar Ortega (Collective management of irrigation in Eastern Spain. Intgration of new technologies and water resources) constituye un interesantísimo estudio sobre la adaptación de la gestión colectiva del riego a la incorporación de las tecnologías y recursos propios de los nuevos tiempos.

La evolución del regadío tradicional

A partir del estudio del regadío de la Real Acequia de Moncada (RAM), el más importante de la huerta de Valencia, Vicent Sales profundiza en la evolución de la superficie irrigada a lo largo del tiempo, en el uso de los recursos hídricos y en el papel desarrollado por las élites políticas y económicas en la conducción del proceso.

Sales ha dedicado varios lustros a bucear en archivos desordenados, a recorrer palmo a palmo este territorio de huerta y a reflexionar sobre un proceso milenario que se inició en el siglo VIII con el asentamiento de clanes bereberes y que ha continuado hasta nuestros días.

De las primeras alquerías a la conquista cristiana

Aquel primer regadío consistió en el aprovechamiento de fuentes, en cuyo entorno surgieron los primeros núcleos de población, las alquerías. A finales del siglo X, con la construcción del canal de derivación de las aguas del río Turia, al recurso hídrico autóctono, las fuentes, se añade este otro recurso permanente que, mediante sucesivas desviaciones, propició una densificación de los espacios irrigados dentro de la trama ya establecida.

Por último, a partir del siglo XIII, tras la conquista militar, la colonización y la transformación feudal de la sociedad por parte de la corona cristiana, decidida a continuar con la agricultura irrigada, el espacio se reestructura; se produce una concentración de los núcleos habitados, que disminuyen en número y aumentan en tamaño; se amplía la red de riego, y el modelo proporcional andalusí es paulatinamente sustituido por otro basado en la adscripción permanente del agua a las parcelas y a la igualdad de derechos de cada una de ellas al disfrute regular del agua.

Las ampliaciones modernas del Jovedat y el Extremal

El resultado del nuevo proceso de ocupación es la creación de un regadío con pleno derecho al uso del agua del Turia, el Jovedat, y unos espacios externos al sistema que emplean recursos hídricos autóctonos y aprovechan los sobrantes del sistema: el Extremal.

Y sobre esto precisamente versa la tesis de Vicent Sales, del crecimiento de uno y otro, de la evolución del Jovedat y el Extremal vinculados a la Real Acequia de Moncada, de las ampliaciones modernas de los regadíos históricos de la Huerta de Valencia.

La tesis de Mar Ortega y los dilemas de la gestión del agua

Si el trabajo de Vicent Sales se centra en el ámbito de la Real Acequia de Moncada y la evolución de las formas de riego tradicionales de la Huerta de Valencia, Mar Ortega amplía el alcance de su estudio a otros sistemas de regadío, así como a la incorporación de nuevas tecnologías y recursos.

Resumiendo, Ortega reflexiona en su tesis sobre los dilemas actuales de la gestión del agua, centrándose en las medidas que actualmente predominan en Valencia, pero contemplándolas también a escala global: la implementación del riego localizado, la reutilización de aguas residuales tratadas y el uso conjunto de los recursos superficiales y subterráneos.

Nuevos tiempos para las reglas del riego

Esta agrónoma opta por conocer y analizar cómo son en cada caso los diferentes aspectos de la gestión colectiva del riego, atendiendo especialmente a la percepción que de su evolución tienen los propios regantes.

Estudia, por ejemplo, los principios de operación en el manejo del agua —proporcionalidad y uniformidad de la frecuencia de riego— y su transformación en reglas aplicables a la gestión colectiva, reglas que dan lugar a interacciones donde priman la equidad y la transparencia.

Y analiza cómo estas normas tradicionales relacionadas con el aprovechamiento de las aguas superficiales se adaptan a los nuevos desafíos, tales como los que representan, como ya se ha dicho, la implementación del riego por goteo o el uso conjunto de nuevos recursos como son las aguas subterráneas y las aguas residuales tratadas.

Un manual para la toma de decisiones

En conclusión, la obra de Mar Ortega puede resultar muy útil a la hora de adoptar o modificar las difíciles y complejas políticas de regadío, puesto que identifica y compara aspectos locales que influyen en la asunción o adaptación de medidas, tecnologías y recursos por parte de las comunidades de regantes u otros gestores del riego.

——————–

Pie de foto: Vicent Sales, a la derecha, defendiendo su tesis ante el tribunal formado por Artemi Cerdà, Thomas F. Glick y Carles Sanchis Ibor.